Hace poco leí que la universidad Deusto cuando cambió el nombre de la titulación de informática de Licenciatura a Ingeniería vio que la cantidad de matriculas descendía enormemente. Cuando lo analizaron se dieron cuenta que al llamarla Ingeniería las mujeres habían dejado de matricularse en esa carrera.
Parece exagerado que el simple nombre repela a las mujeres jóvenes que buscan su carrera profesional, sin embargo en un momento en el que las mujeres acceden a la Universidad mucho más que los hombres llama la atención que en muchas carreras técnicas éstas no lleguen ni al 20%.
Los motivos son probablemente en gran parte culturales, se tiene la impresión que un trabajo técnico es masculino. Y por otro lado, las empresas de ingeniería son las que menos desarrolladas tienen las políticas de conciliación familiar aunque sinceramente dudo que eso se tenga en cuenta con 18 añ
os cuando eliges carrera.
Yo estudié en una de esas carreras, en la Universidad
Politécnica de Cataluña y el primer día de clase me dieron ganas de abandonar. Éramos unas 5 mujeres en una clase de 50 personas y me sentí como un bicho raro. Más tarde en mi primer trabajo como ingeniera mi jefe me dijo el primer día que estaba en plantilla porque la empresa, que era "muy americana", había decidido que existiese una cuota de mujeres en cada departamento pero que no contaba conmigo para nada. No estoy hablando de hace 40 años, sino unos 10.
Y ese gran déficit de mujeres en las carreras técnicas se traduce también en que los sectores de la Industria y la Construcción son los que menos mujeres directivas tienen. Por lo tanto, podrían las universidades realizar campañas para atraer al talento femenino a las carreras técnicas? Algo parecido a las campañas para reclutar gente que hace el Ejército. Y qué nos ocurre a las mujeres? Es que no queremos estar al frente de compañías eléctricas, fábricas, empresas de construcción, automoción, aeronáutica...?
Autora:
Nieves Torres es Ingeniero Técnico de Obras Públicas y Master en Asesoría y Consultoría Inmobiliaria por la Universidad de Barcelona.
Tiene 10 años de experiencia en el sector eléctrico especializada en materiales y eficiencia energética. Actualmente dirige su propia empresa Planta21 Energycom dedicada a la Ingeniería de materiales eléctricos.